sábado, 25 de octubre de 2014

Incoherente confesión

Está bien, si así lo quieres así será. Me acostaré otra vez sola esta noche.

Pero no sin antes confesar, que ésta reciente distancia, me está destruyendo. Y es una distancia avisada, prevista...pero aun así doliente. Duele saber que cada noche me pierdo en el débil rastro de tu aroma que me queda. Duele saber que estuve, por breves segundos, rodeada por ti. Duele saber que te creí. Duele saber  que me avisaron del dolor, y aún así seguí. Duele recordar tu mirada, y a la vez recordar ese destello de cariño que creí ver. Duele esta angustia de que estoy perdiendo algo que nunca tuve, de que mis palabras se pierden en el vacío. Duele recordarte, duele saber que existes. Duele saber que estás ahí, pero no para mi.

Quiero que me busques, quiero que quieras sujetar mi mano, quiero que vuelvas a abrazarme. Quiero... Quiero que hagas tiempo para mí. Quiero que vuelva tu interés, que vuelvan tus palabras, que vuelvan tus ganas. Quiero dejar de sentir que cambié una seguridad por algo pasional.

Quiero recuperar toda esa atención que una vez fue mía.

Quiero saber que está pasando...

Quiero saber si debo alejarme.

sábado, 9 de agosto de 2014

MIERDA

Que increíble como alguien te puede cagar la noche simplemente recordándote tus putos errores como  si tu ya no los tuvieras presente cada día, como si no estuvieran grabados en tu piel peor que un tatuaje.

Simplemente no lo haré. 
Terminaré todo y lo deslizaré bajo tu puerta, ya queda de tu parte.

Estoy cansada, con un nudo  en la garganta, sintiendo el mundo encima. Pero todo el mundo es más perfecto.

Yo soy el error.
La silaba que no entró en la canción, ese pedazo de barro que le sobró a Dios, esa semilla que se escapó de la bolsa,  ese grito que callaste por educación, esa copa que no soltaste y te tumbó.

Necesito ayuda otra vez
Es bastante patético y vergonzoso imaginarte una vida que no tendrás y pasarte cada segundo del día señalando al culpable frente a un espejo en un cuarto vacío.

Por esta noche me quedaré, pero no precisamente dormida

sábado, 21 de junio de 2014

VIDA

No tengo ganas de nada
Todo el mundo me juzga
Nada de lo que hago sirve
Todo es un asco
Cuando intento mejorar, soy minimizada
Criticada por gente que no ve sus propios errores
Quiero vivir sola, Sola, SOla, SOLa, SOLA
No quiero depender más de nadie
Pero, ¿y esa persona?
Entenderá
¿Y si no?
Pues no lo sé
Pero lo quiero
No quiero seguir en esa casa
Pero no quiero dejarla
Soy una imbécil
Nadie se complica tanto como yo
Perdí mi talento
Soy una puta
Pero sólo  fue un error
"Regalada diciendo puta por deficiencia mental"
Hasta la que más se equivocó, es mejor que todas
La luz al final del túnel
Y no siempre estarás
Las mismas palabras de siempre
Pero ninguna reacción
No querer lo temprano
Pero odiar lo tarde
Temer la burla
Pero burlarse
"Plaga de la humanidad"
Clásico
Moderno
Nada
Todo



¿Qué?

Nada

Sola, otra vez sola. Pues mierda. Ese  desagradable interés de las personas de hablar de ti y no contigo, de acercarse a ti, saber tu vida y luego contársela a los demás. Ésta asquerosa y repugnante sociedad donde debes estar ahí para los demás, pero ni siquiera soñar con que te ayuden; donde destruir, humillar, insultar y degradar a una persona, es la máxima demostración de poder, donde frente a un adulto te doblegas, te justificas y sonríes, mientras que con los demás mientes, utilizas y delatas.

La angustiante sensación de tener lágrimas a flor de piel, pero no sacarlas por fortaleza y por no parecer imbécil ni dramática a los demás. Damos asco, pena y lástima, y por eso hacemos lo imposible por minimizar a los responsables, y por sacarnos valía de estupideces. Y  las pocas luces que quedan, nos enfocamos en apagarlas.