Resulta que en este país es más fácil falsificar una cédula
que sacar una nueva, porque el sistema se cae pero el gobierno no. Que
ridículo. Me recorrí dos Saime después de salir de clases (que por cierto, que
desastre el metro) y ninguno con sistema. Aquí nada funciona, por eso es que no
salimos adelante nojoda. Ahora me toca perder mi lunes también.
Como no es nada raro en mi, después de estar arrecha,
termino llorando porque palabras de mi mejor amiga me hacen pensar en que cada
vez está más cerca ese "hasta luego" en el aeropuerto. Se me hace
super difícil solo pensarlo, siento que moquearé hasta inundar el aeropuerto,
el país, el continente...
No hay comentarios:
Publicar un comentario